Entonces, un día, así de la nada, ves la portada del libro, en algún lugar de internet o en alguna librería o tienda, qué se yo.
El punto es que al verlo, de una forma llamó tu atención y dices "Lo quiero leer". Bueno, pues a mi me pasó mas o menos lo mismo con este libro. Me encontraba aburrida en mi casa, pues eran vacaciones y como la gente normal, decidí pasar mi tiempo libro haciendo quién-sabe-qué en Internet. Malgastando mi tiempo en una página conocida como Pinterest, encontré la portada de éste libro, llamó mi atención más que nada por el título, para mi gusto sonaba un poco deprimente pero no sé porqué sentía que debía leerlo.
Empece mi investigación sobre el libro, ya saben lo usual, leer reseñas y síntesis para ver de que trataba. Y la verdad, es que no me incitaba a querer leerlo, pero de una forma, mi subconsciente me decía "¡vamos! ¿por qué no?". Así que seguí a la vocecita y lo busqué.
El libro en inglés se llama "Before I fall" pero en español se llama "Antes de caer". La autora es Lauren Oliver y es la primera novela que escribe a pesar de ser tan joven.
Lo que me gustó de este libro es que no tiene NADA que ver con hombres lobo, vampiros, extraterrestres, demonios, magos, etc.
De una forma es realista, se basa en cosas de la vida cotidiana.
La historia se centra en una chica, Samantha Kingston, típica chica popular, guapa, que lo tiene todo, el novio perfecto , el rostro perfecto, el cuerpo perfecto, ustedes comprenden. Ella y sus tres amigas son muy unidas pero son como las chicas de Mean girls, a pesar de ser bonitas, son malas, de lo que se dice malas.
Un día, para ser específicos, el 14 de febrero, van a una fiesta y pasa algo, un accidente automovilístico. Pero no pasa lo que se supone que debe de pasar, Samantha no muere o despierta en un hospital sino que se encuentra en su cama, como si nada hubiera sucedido, una mañana común y corriente, pero hay un problema, no es un día común y corriente, es 14 de febrero y Samantha se ve repitiendo el mismo día. Pensando en que es una locura o un sueño, la joven actúa de forma normal durante todo el día hasta que el accidente se repite y vuelve a despertar en su cama siendo 14 de febrero, otra vez. Así se repite el mismo día 7 veces. Samantha no sabe que hacer y cada día lo vive de diferente forma tratando de averiguar que es lo que tiene que hacer para salir de esa tortura, pues estar atrapada toda la vida en el mismo día no es nada divertido y menos presenciar tu muerte 7 veces seguidas.
A lo largo de la historia, ella se da cuenta que no es perfecta, sino todo lo contrario, entiende que todo este tiempo se ha comportado como una chica egoísta, vanidosa, engreída y grosera. Además, encuentra que las personas a su alrededor no son lo que pensaban y que las que valen la pena pueden estar justo enfrente de ella y nunca haberlo notado.
Los personajes están muy bien hechos, llegas a odiar al personaje principal por todas las cosas que hace, en mi opinión, la autora logra retratar a la perfección al estereotipo de chica popular junto con todos los estereotipos que se pueden encontrar en una preparatoria.
La historia no es muy pesada, no hay un vocabulario aburrido, lo que te llama a seguir leyendo es que quieres saber como vive cada día pues todos son diferentes, quieres saber en qué va a terminar y, al menos para mí, el final fue sorprendente. Nunca lo vi venir.
Sin duda alguna, es un libro que en verdad te hace reflexionar, es como un cuento con moraleja pero la moraleja no es la misma para todos y sólo la entiendes cuando haz leído todo el libro.
Después de todo mi subconsciente tenía razón porque este libro me funciono mucho para entender lo que pasa en la actualidad.
Lo recomiendo totalmente, pero como les dije antes, es mejor cuando un libro llega de las formas más inesperadas...
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